viernes, 21 de agosto de 2009

Se hizo justicia

El trabajo nos hace ascender como personas, mientras que la falta de trabajo nos incita a la violencia, a la droga, a la delincuencia.

Pocho Lepratti



“Pocho era un ángel” En Rosario esta es una de las frases que más se repetía en aquel fin de año del 2001. El Pocho Lepratti era un humilde ayudante de cocina en una escuela del periférico barrio de Las Flores. El gobernador de Santa Fe, Carlos Reutemann había enviado a la policía a detener los saqueos a negocios que por ese entonces se multiplicaban en todo el país. El Pocho se subió al techo de la escuela para exigirle a los policías que dejaran de disparar porque ahí sólo había pibes comiendo (como recuerda Gieco en su canción). Lo mató el agente Esteban Velázquez, con un balazo de plomo que le perforó la tráquea, quien cuando fue increpado por los vecinos respondió: “Y bueno, nena, ¿para qué insultaba?”

Claudio "Pocho" Lepratti que nació en Concepción del Uruguay el 27 de febrero de 1969 fue un militante social que cursó la escuela primaria y secundaria en esa misma ciudad. Luego se mudó a Rosario para estudiar Derecho. En1986 ingresó como seminarista en un instituto cercano a esa localidad. En 1991 lo abandonó, fijando su domicilio primero en el barrio Empalme Graneros y un año después en el humilde barrio Ludueña, acercándose a colaborar en la tarea de contención social de los adolescentes del barrio, donde comenzó a participar activamente de las organizaciones de base. Al tiempo que militaba gremialmente en la Cocina Centralizada, donde fue delegado y participó de la histórica carpa como uno de los tantos despedidos por su actividad sindical.

Participó y promovió la formación en más de veinte grupos de niños y jóvenes de las barriadas populares de Rosario. Siendo la primera agrupación La Vagancia.

Participó en instancias de coordinación con otros grupos como la revista El Ángel de Lata, el movimiento Chicos del Pueblo, y con todas las comunidades eclesiales de base, como Poryajhú, y el grupo Desde el Pie.

La Dirección de Asuntos Internos de la policía provincial había reconocido en un informe que “el asesinato del militante social Lepratti ocurrió fuera de la zona de saqueos y en los fondos de una escuela”, y que “no se justifica haber efectuado los disparos reconocidos, aun en carácter intimidatorio”. Los policías acusados argumentaron que habían abierto fuego porque habían sido atacados a balazos por vecinos apostados en el techo de la escuela. El vehículo policial tenía efectivamente marcas de balazos, pero todos realizados a nivel del suelo.

Desde ese momento Lepratti se convirtió en un mártir y símbolo de la resistencia de los sectores más desposeídos de la provincia de Santa Fe.

Ayer se conoció la noticia de que cinco policías fueron condenados por encubrimiento por este hecho. Velázquez ya había sido condenado a 14 años de prisión por este asesinato.


Para los que reclamamos por una justicia más eficaz para todos, ayer se hizo justicia



9 comentarios:

Alma naif dijo...

Excelente informe Luis!!!
Como siempre...
Duele, pero se hizo justicia!!!
No se si eso alcanza, creo que no deberias llegar a pedirla (Esto jamas deberia suceder)
Mil besos llenos de luz y buen fin de semana!!!
Perdona que no pase antes es que no me daba para leer nada (ahora lo hago desde la cama)

Unknown dijo...

al menos en un caso se hizo justicia!!!!!
no conocía ésto que cuentas y es muy triste que haya pasado..
situaciones que podrían haberse evitado si las personas que tienen poder, en este caso del uso de armas de fuego,lo usaran cómo debe ser.
lamentable....

un abrazo,amigo

Neogeminis Mónica Frau dijo...

Así es, además, la presencia d ePocho sigue constante en los barrios más humildes.
Buen informe.

saludos!

Taller Literario Kapasulino dijo...

Fue algo terrible lo que paso...
tambien fue increible que sucediera...Todavia no lo puedo creer

jime dijo...

yo vivía en un taper cuando pasó esto parece...no sabía nada...

pero es realmente increíble.
si me permitís decirte algo acerca de lo que pienso sobre esto...creo que tiene cabida hablar al nivel de la psíquis del autor del crímen, y como está todo mal parido, mal conjugado de entrada, es decir, irónicamente alguien que reaccione (a lo que que el dice que fueron puteadas) asi, con un tiro, jamás debería llevar un arma. Hay personas que se tienen que ocupar de que esta gente no vele por nuestra seguridad. de quién deberíamos cuidarnos sino?
da para mucho el tema, pero la verdad que me siento con un poco de dolor d cabeza (gracias a una joda de anoche) asi que dejo este comentario por aca


un saludo grandote como siempre
y muchos besos luisin



jimena.

Guillermo Tassone dijo...

Estuve viendo tu blog, luis, muy bueno, me quedé especialmente detenido en el pocho lepratti, que fue algo que me causó y todavía me sigue causando mucho dolor. Aparte tengo una convicción, en este pais a los pobres se los mata con mucha facilidad. cariños. guille

Anónimo dijo...

Hola Luis!!!
Completaste la historia de Pocho que solo conocía por la canción de León.
Dejame reflexionar, aunque el comentario sea antipático.
No entiendo una Justicia que da 14 años por un asesinato a sangre fría y 20 años a Chaban para usarlo como chivo expiatorio de una cadena de irresponsabilidades compartidas.
Puede ser que Chaban lo meresca, pero al comparar los hechos algo no me cierra. Te mando un abrazo.-

Deprisa dijo...

Me alegro mucho de esa condena. Uno de los grandes peligros que acechan, adem´s del abuso del abuso de poder, es la impunidad. Que pagen y que el siguiente criminal con uniforme se lo piense dos veces antes de disparar.

La Turca y sus viajes dijo...

Hola!!!!!!!!!

Estoy tan feliz por tu blog, es que cada vez que entro me sorprendes con notar espectaculares, no se si sos periodista, pero tienen eso de una buena nota periodística y tan bien relatada, tengo tanto que aprender, te cuento un secreto al no saber escribir muy bien lo hago en el Word y de allí pego todo y lo demás lo digo con fotos, son ellas las que me salvan jijiji.
Muy buena tu entrada de hoy……………
Un besote y abrazo de oso.